Una traducción libre del documento  Learning Forever: Deconstructing  Today´s Education de Miguel Ángel Escotet

Aprendiendo por siempre: deconstruyendo la  educación de hoy

Uno de los problemas que enfrenta la educación de hoy es la dificultad para adaptarse a los avances de la ciencia y la tecnología. Las instituciones educativas y sus sistemas de enseñanza se encuentran rezagados en relación  a adaptar nuevas formas de conocimiento y aprendizaje. 

Precisamente la  educación formal tiene dificultades en asimilar los cambios de pensamiento, los descubrimientos científicos, las nuevas tecnologías, el cambio constante de la población estudiantil y la emergencia de la educación paralela en la forma de internet y multimedia.

El sistema de educación por sí mismo es  reacio a aceptar nuevas técnicas  y ayudas. En la edad del satélite, de la comunicación instantánea, las universidades aun usan  tableros o presentaciones en power-point  como placebos.  Es decir, la educación hoy esta esclavizada en el pasado.

La educación a distancia o educación abierta (open education como es conocida en inglés)  es un ejemplo de  una tecnología  que  puede vincular el vacío entre los descubrimientos científicos y su difusión. Es imposible  para el sistema de educación formal, basado únicamente solamente en la interacción estudiante y profesor mantener el paso con los avances de la ciencia y la tecnología.  La educación abierta  ofrece una forma de adaptar la educación a la tecnología presente y futura.  La difusión rápida  de su popularidad en  todos los países ofrece  esperanzas  para nuevos patrones de educación institucional.   Con todo la educación a distancia requiere una aproximación cuidadosa, puesto  que  no hay garantía de que  un proceso innovador  pueda producir  por sí mismo  nuevos procesos  o resultados innovadores sino muy por el contrario resultados extremadamente conservadores.

La educación abierta o a distancia puede ser de mucho valor en el siglo XXI pero puede también  volverse en un sistema que profundice la brecha entre nosotros y nuestra utopía con un futuro indeseable.  La crítica mayor  a  las técnicas de la educación a distancia    consiste en  la generación de información para producir gente entrenada.  Lo que el mundo realmente necesita  son personas educadas, capaces de entender las fuerzas  que mueven el mundo, y quienes puedan adaptarse a ellas y transformarlas. La persona  entrenada  por le educación a distancia  observará  que su  instrucción es rápidamente obsoleta mientras la persona educada  desarrollará o creará nuevas  habilidades cuando sea necesario. Además es importante tener en cuenta  se entrenan los animales, las personas se educan.

La educación a distancia debe  enfatizar los aspectos formativos y creativos sin descuidar la instrucción; simplemente   se deben encarar las dos variables: los dominios afectivos y cognitivos.  En la educación a distancia el estudiante se vuelve apenas receptor de una información más o menos sistematizada; el estudiante se aísla en su relación verticalizada con el material.  Una educación comprehensiva  llama a la participación  natural del estudiante que le provoque una explosión de interés en    transformar y a crear nuevo conocimiento.

La  participación  es lo fundamental y ésta  consiste en retar el conocimiento en su relación  y a efecto sobre la realidad en un intento de comprender, explicar y transformar. La significancia de los descubrimientos científicos debe ser discutida, como lo deben ser las dimensiones históricas  y futuras del conocimiento, su lugar en el tiempo  y su aplicación. Necesitamos   pensamiento constructivo y crítico  más allá de adquirir un conocimiento sin razón.  El mejor estudiante de física  no es el que mejor memoriza para  aplicar la fórmula, sino aquel  que entiende su racionalidad. El mejor estudiante de filosofía no es el que   puede ilustrar mayor el pensamiento de Platón, Aristóteles, Rusell o Hegel, pero  quien se aproxima  a ellos de  forma crítica y  que se atreve a pensar.

El reto de la educación es convertir  la educación de masas  en una  educación formativa de dos vías con la cual será posible pensar en utopías  y cambiar el curso de la historia.  El reto  cualitativo  y cuantitativo de la educación se incrementa cuando consideramos la educación formal. Precisamente esta educación que toma unos pocos años de la vida no es  garantía de la preservación y el mejoramiento de la condición humana, un ideal  que implica el continuo perfeccionamiento del ser humano.   No hay un final de la educación a los 24 o a los 26 años lo que se necesita es  una educación continua en la que la sociedad adopta  una actitud de aprendizaje  a través de la vida que le permitirá  a su vez adaptarse al futuro sin destruir  las estructuras y los valores de los que depende   la  supervivencia  del ser humano  y su cultura.

Por el contrario al limitado abanico de la educación presente, la educación continua o el aprendizaje de por vida,  formales e informales, es una de las metas del pensamiento utópico. Esta educación le confiere a la universidad  un mayor papel  que la mínima transmisión del conocimiento; le enseña a las personas como aprender y como  ir por el camino del aprendizaje  después de dejar el sistema de educación formal. Va más allá de expedir un certificado que reconoce el cumplimiento  de solo un paso en la educación y  cambia las estructuras por las cuales  la sociedad  asigna calificaciones.

Aprender en el siglo XXI, asumiendo que el mundo es un Armageddon de repuesto  requiere una mayor participación del sistema de educación en su propio futuro. Gracias  a la tecnología, los métodos de  adquirir información  serán  cada vez más simples y precisos. El día de trabajo será más corto, dejando tiempo para el ocio creativo y hacienda la educación un proceso menos jerárquico  y mucho más   un proceso en desarrollo durante la vida de las personas.  El sistema educativo  redescubrirá su verdadero papel, el cual es servir al individuo, ayudar a la gente a  desarrollar   sus habilidades cognitivas   y a desarrollar  una conciencia crítica, en desarrollar dominios afectivos  y a cooperar con otros .  La información  no tendrá un lugar de orgullo en este sistema, puesto que esta puede ser adquirida  a través de formas   no institucionalizadas y métodos informales.   La información y el autoaprendizaje  irán mano a mano a la expensa del otro

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La dirección del documento original: http://miguelescotet.com/2015/learning-forever-deconstructing-todays-education/